ME DIRIJO A VOSOTROS
El hombre tiene que responder por su forma de vida terrenal, por su pensar, hablar y actuar, porque recibió de Mí el don del entendimiento, el don de pensar y, por lo tanto, puede considerar todo, en qué medida corresponde a Mi voluntad …. Esto vale en especial por su ajuste para las enseñanzas que le han sido transmitidos por parte de sus semejantes, que tocan áreas espirituales …. Porque tan pronto como se le ofrece algo terrenal, él ajusta también sus pensamientos a esto y él acepta o rechaza, y eso a menudo con gran celo, tan pronto como espere algún beneficio de ello.
El hombre es capaz de pensar y ahora también debe usar esta capacidad …. Y si ahora se le transmite propiedad intelectual, también debe someterla a un examen para ahora poder aceptar o rechazar con autorización …. Pero entonces no debe confiar solamente en el semejante lo que este le aconseja, sino que debe tomar su propia posición al respecto, porque tendrá que responder por sí mismo para eso, y luego no podrá echar la culpa a su semejante quien le ha aconsejado su pensar y actuar ….
Cada ser humano lleva la responsabilidad por sí mismo …. porque cada ser humano puede pensar …. Y si no está seguro de la exactitud de sus pensamientos entonces de be tomar el camino a Mí Mismo, pero confiarse en el semejante, cuyo pensamiento también puede ser dirigido equivocadamente …. Y una gran injusticia comete el hombre, que se cree llamado de tener que influir en el semejante e imponerle sus puntos de vista …. para que este acepte sin contradicción lo que aquel le ofrece.
A una persona se le puede enseñar, pero siempre tiene que ser libre de aceptar estas enseñanzas, porque la persona misma debe tomar una decisión y responder por su decisión, pero no puede traspasar la responsabilidad a aquellos, quienes le han instruido y aquellos nunca deben determinar a una persona a aceptar las enseñanzas …. La libertad de la voluntad es el gran factor determinante para la perfección de un hombre y cada recorte del libre albedrio es una injusticia, un pecado, que Yo no puedo a aceptar sin exigir retribución por eso ….
Y nuevamente hay que señalar que, por parte de un maestro, primero se deben hacer resaltar los mandamientos de amor y que solamente se debe requerir el cumplimiento de estos mandamientos, porque entonces el pensamiento humano reconocerá claramente lo que es verdadero y correcto y luego el hombre mismo se decide para esto …. Pero aceptar una enseñanza y rechazar una vida amorosa nunca puede llevar puede llevar a un éxito espiritual …. Incluso si aquella enseñanza corresponde a la verdad ….
Pero los hombres sin amor nunca podrán juzgar donde hay verdad y error …. y, por lo tanto, no es el entendimiento del hombre que lo decide, sino el amor del corazón …. Y donde falta este, no se podrá hacer un juicio correcto, pero entonces no sirve de nada la aceptación de una enseñanza sin contradicción, porque no tiene ningún valor para el alma …. Es por eso que Yo primero pido una opinión mental sobre cada propiedad intelectual que se transmite a una persona desde el exterior. Y si ahora se le presenta la enseñanza de amor y el también piensa sobre esta, entonces se puede encender una pequeña luz en él y puede esforzarse por vivir el amor …. y sólo esto lleva el alma a madurar ….
Quien entonces busca de animar a sus semejantes al amor, será bendecido por Mí. Sin embargo, cualquiera que transmite un bien espiritual con la exigencia de aceptarlo y reconocerlo sin contradicción no actúa de acuerdo con Mi voluntad, porque provoca que los hombres entran en una pesadez mental y estos ahora creen que están exentas de su responsabilidad y poder transmitirla a quienes les enseñaron. Esta excusa un día no valdrá ante Mí, porque Yo he equipado a todos los hombres con el don de la capacidad de pensar y está ahora debe ser usada cuando se trata de la Salvación de las almas, especialmente cuando penséis ansiosamente en todo lo terrenal, si y cómo podría ser de utilidad para vosotros.
Ningún ser humano os quitará una vez la responsabilidad, así que tampoco no dais a nadie el derecho de tener una influencia decisiva sobre vosotros, si se trata del bien de vuestras almas. Incluso entonces recibiréis una luz Mía al respecto si escucháis Mi Palabra que os suena desde arriba, que transmito a todos que son de buena voluntad ….
No os voy a obligar, siempre os voy a explicar y razonar todo, y siempre os doy la libertad de aceptar o rechazar Mi Palabra …. Porque quiero que os perfeccionáis en la tierra. Y, por lo tanto, quiero informaros sobre todo lo falso para que no os dejéis determinar a pensar y actuar a través de la voluntad del semejante, sino antes de nada examinar por vosotros mismos, si y cómo pensáis y actuáis vosotros delante de Mí, Quien Yo os he creado de tal manera, que cada ser humano también tiene que asumir la responsabilidad por sí mismo y la salvación de su alma ….
Amén